RDD-N23-Septiembre-2021

49 ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016 Nº 23 - SEPTIEMBRE 2021 Palabras clave: Design Thinking; Educación; Innovación metodológica; Creatividad. Abstract: Design Thinking is an emergent teaching methodology that follows the steps of the design process. Although some teachers may be sceptical of the use of product designers’ methods in education, there are many arguments that support the use of this teaching methodology in the classroom, including its capacity to sti- mulate students’ creativity. Hence, this article aims to reveal the huge pedagogical potential that Design Thinking hides. Key words: Design Thinking; Education; Methodological innovation; Creativity. El enorme potencial pedagógico del DesignThinking Innovación metodológica en el aula ALBA MUÑOZ LEÓN • Graduada en Traducción e Interpretación • Máster de Formación del Profesorado • Profesora de Inglés • Miguelturra (CIUDAD REAL) El Design Thinking podría definirse como una metodología emergente de enseñanza-aprendizaje caracterizada por seguir los pasos del proceso de diseño. Aunque algunos docentes pudieran permanecer escépticos ante la idea de emplear métodos propios de los diseñadores de productos en la educación, existen numerosos argumentos que respaldan el empleo de esta metodología en el aula, entre ellos su capacidad para estimular las capacidades creativas del alumnado. Por ese motivo, el objetivo de este artículo es revelar el gran potencial pedagógico que esconde el Design Thinking. E l Design Thinking o Pensamiento de Diseño es una disciplina tre- mendamente humanística que se originó en la Universidad de Stan- ford, California, en la década de los 70, ante la necesidad de hallar so- luciones innovadoras en el contexto del diseño de productos (Martínez, 2020). Sin embargo, es en el año 2008 cuando Tim Brown, director ejecutivo de IDEO 1 , aporta una de- finición al término Design Thinking , en un artículo que escribió para la Harvard Business Review titulado ‘‘Design Thinking’’ (Brown, 2008a). Sin embargo, a pesar de presentar múltiples beneficios pedagógicos, el Design Thinking es una metodología aún desconocida por parte del pro- fesorado. Por ese motivo, explicare- mos en qué consiste y cómo se po- dría implementar esta metodología en el aula. ¿En qué consiste el Design Thinking ? El Design Thinking es una metodo- logía didáctica en la que el alum- nado aprende resolviendo retos o problemas de manera cooperativa siguiendo las cinco fases del pro- ceso de diseño . Según IDEO (2012), la primera fase es el descubrimiento , que consis- te en comprender las necesidades e intereses del usuario final a través de conversaciones y una escucha activa que nos permita desarrollar empatía. La segunda fase es la interpretación , que consiste en definir la información recopilada en el paso previo, conser- vando únicamente aquellos datos que contribuyan a conocer al usuario final. La tercera fase es la ideación , que consiste en generar ideas a partir de las necesidades o desafíos identifica- dos, para lo que resulta especialmen- te útil la técnica de la lluvia de ideas 1 . La cuarta fase es la experimentación, que consiste en prototipar las ideas empleando cualquier tipo de material. Según Brown (2008b), la creación del prototipo es esencial porque permite dar vida a nuestras ideas y hacerlas tangibles. Por último, la quinta fase es la evolución, que consiste en obtener retroalimentación positiva para poder mejorar el prototipo y obtener el re- sultado deseado. 1 IDEO se define a sí misma como ‘‘una compañía global de diseño, ganadora de premios, que adopta un enfoque centrado en el ser humano, con el objetivo de ayudar a innovar y crecer a instituciones de los sectores público y privado’’ (IDEO, 2012). Fue fundada por David M. Kelley en Palo Alto, California. 2 La lluvia de ideas o brainstorming es una técnica que permite al alumnado aportar sus ideas sin miedo a ser juzgados. Como explica IDEO (2012), la lluvia de ideas invita a dejar volar la imaginación y da paso a ideas innovadoras. Sin embargo, para que sea efectiva debemos obedecer siete reglas: la primera es ‘‘aplazar el juicio’’, es decir, no debemos descartar ideas de manera precipitada; la segunda, ‘‘fomentar las ideas extravagantes’’ porque, aunque no parezcan factibles, pueden dar pie a nuevas ideas que sí lo sean; la tercera, ‘‘construir sobre las ideas de otros’’, es decir, hacer aportaciones a las ideas ajenas; la cuarta, ‘‘mantenernos enfocados en la temática’’ para no desviarnos del objetivo; la quinta, mantener ‘’una conversación a la vez’’; la sexta, ‘‘dibujar nuestras ideas’’ para que sean visuales; y, la séptima, ‘‘buscar la cantidad’’, es decir, cuantas más ideas, mejor.

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