RDD-N24-Diciembre-2021

15 ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016 Nº 24 - DICIEMBRE 2021 • La empatía cognoscitiva, el com- prender la perspectiva del otro. • Detectar las señales sociales que indican lo que los demás quieren o necesitan. • La escucha de los demás. • La asertividad: expresar opinio- nes y sentimientos, sin ira ni pa- sividad. • La colaboración y la cooperación. Dimensión motivacional Si la meta está puesta en el aprendizaje, se puede enfatizar el valor intrínseco del aprendizaje y del esfuerzo. Si por el contrario la meta está puesta en el rendimien- to, se enfatiza la capacidad como determinante del rendimiento, evitando tareas complejas. Es importante promover activida- des que se centren en el desarro- llo de las capacidades, y no en los resultados obtenidos. Para ellos hay que revisar las propuestas de aprendizaje, y la evaluación que se aplica. Durante la etapa de primaria se desa- rrollan las competencias emocionales sociales como la empatía cognitiva, la idea de igualdad, la cooperación, la sensibilidad social, y la flexibilidad de la conducta en entornos sociales. Las emociones son la base sobre la que se sustentan los procesos ra- cionales que permiten el aprendizaje de procesos más racionales como la lecto-escritura y el cálculo. Las emociones van a posibilitar el aprendizaje a través de procesos personales (capacidad de autorre- gulación), relaciones sociales (inte- racción con el profesor y compañe- ros) y motivacional (determinación para fijarse objetivos y perseverar en el esfuerzo). Los déficits emocionales van a es- tar presentes en los trastornos del aprendizaje; éstos son aquellas manifestaciones de la conducta que derivan en actitudes disruptivas o pasivas. Los déficits emocionales se identifican a partir de indicadores externalizantes como la agresividad y hostilidad en general, poca tole- rancia a la frustración en situaciones de presión, comportamientos para llamar la atención, etc. e internali- zantes, como baja percepción de control personal, ansiedad, auto- concepto negativo y depresión. Como propuesta de intervención la actuación docente se ha de basar en potenciar el autoconcepto, la auto- estima, la autorregulación y las in- teracciones sociales cooperativas y la motivación. La no detección de estos problemas repercutirá en el bienestar y en la mo- tivación por aprender del menor. Sin apenas darnos cuenta y sin que la causa sea perceptible, alejamos a es- tos niños, desde su más tierna infan- cia, de su derecho y oportunidad de crecer en las mismas condiciones que sus compañeros y, al mismo tiempo, los alejamos también de poseer las herramientas necesarias para el día de mañana, donde puedan gestionar sus propias vidas con suficientes re- cursos emocionales para dedicarse a aquello que les apasione y les motive. Bibliografía • Agulló, M.J. (2010). La educación emocional en la práctica . Barcelona: I.C.E. Universidad de Barcelona. • Bisquerra, R. (2006). Educación emocional y bienestar . Madrid: Praxis. • Ibarrola, B. (2013). Aprendizaje emocionante. Neurociencia para el aula . Madrid: SM Innovación. • Morgado, I. (2006). Emociones e inteligencia social: una alianza entre los sentimientos y la razón . Barcelona: Editorial Mina. • Rigó, E. (2005). Las dificultades del aprendizaje escolar. Manual práctico de estrategias y toma de decisiones . Buenos Aires: Editorial Ars Médica. Cómo citar: Poveda Otazo, A. (2021, diciembre). Los trastornos emocionales como dificultades de aprendizaje. Repercusiones en el proceso educativo. Campus Educación Revista Digital Docente , Nº24, p. 11-15. Disponible en: https:// www.campuseducacion.com/revista-digital- docente/numeros/24/

RkJQdWJsaXNoZXIy MTY1NTA=