RDD-N28-Dicembre-2022

36 ISSNe 2445-365X | Depósito Legal AB 199-2016 Nº 28 - DICIEMBRE 2022 antecedente oficial más explícito, sería la política que se lleva desarrollando en la R. P. C. desde que el presidente Deng Xiaoping adoptara en 1978 un conjunto de medidas para que su país despegará de su letargo socioeconómico (Van Mol, 2008). Esta política incluida en otras de mayor alcance, consistían, al igual que hizo Japón durante finales del s.XIX y comienzos del XX para lograr su modernización e industrialización durante la Restauración Meiji, en enviar a sus estudiantes al extranjero para que aprendieran con los mejores expertos, a la vez que aprendían una lengua nueva, y volver a China contribuyendo con sus conocimientos y habilidades, impulsándola hacia delante (Zha, 2008). El aprendizaje de la lengua española en la R. P. C. es muy popular, como afirma Lu Jingsheng, académico de la RAE en ese país y profesor en la Universidad de Estudios Internacionales de Shanghai, al comentar que en China, durante el año 2019 había 20.000 personas estudiando el Grado de Filología Hispánica, y otras 30.000 que estudiaban español por diferentes métodos, y que estas cifras crecerían con el paso del tiempo (Blanco, 2019). De este modo, el aprendizaje de nuestro idioma se convierte en un medio con el que la juventud china puede adueñarse del comercio hispanoamericano y español, y si es posible del mundo entero, al igual que han hecho hasta la actualidad las principales potencias mundiales a lo largo de la Historia. Estos conocimientos lingüísticos, ampliados y perfeccionados gracias a las estancias en el extranjero, ya sea por estudios en universidades extranjeras, y/o a través del Instituto Confucio, se suman a la inmensa población de origen chino, más de 40 millones, que se extiende por la totalidad del globo, formando parte de la Diáspora China, normalmente enfocada al mundo de los negocios, con bastante éxito (Fleischer, 2012). Es por ello, que en el presente artículo se presenta una propuesta educativa, mediante la cual España, lejos de poder competir con la R. P. C. en el ámbito industrial y comercial, se convierta en una fábrica de sinohablantes, y pueda competir con otros países en la carrera educativa. Mientras que el inglés continuará siendo el idioma más útil tanto en el ámbito cultural como el económico, el chino mandarín le tomará el relevo, en un plazo de entre diez y veinte años, aunque de momento, parece que se nos olvida que la mayor parte del tiempo comerciamos con chinos, al comerciar la mayoría de nosotros a través de Aliexpress, Ebay y Amazon. Panorama educativo español en la enseñanza del chinomandarín España cuenta con 50.000 estudiantes de la lengua china y cuenta con el mayor número de inscritos en los exámenes oficiales de nivel de chino (HSK) de Europa y con 4.000 compatriotas estudiando el idioma en la P.R.C. (Xinhuanet.com, 2018). Muestra de ello, es que en nuestro país ya se hayan realizado tímidos acercamientos hacia la implantación del chino como L2, como puede comprobarse en la Declaración conjunta de la República Popular China y el Reino de España sobre el fortalecimiento de la asociación estratégica integral en un Figura 1. Número de alumnos en los Institutos Confucio de todo el mundo en el periodo 2016-2018 1 El Instituto Confucio (孔子学院), es el equivalente chino del Instituto Cervantes español, y está dirigido por la Oficina del Consejo Internacional de la Lengua China o Hanban, dependiente del Gobierno de la R. P. C., como ente promotor de la lengua y cultura chinas fuera de la R. P. C. (Hanban, s.f.). 2 El pinyin es el sistema para escribir chino en alfabeto latino, en vez de emplear los caracteres chinos o hanzi (Cambridge University Press, s.f.)

RkJQdWJsaXNoZXIy MTY1NTA=