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Tema 19 Educación Primaria
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3.‐ Métodos y Estrategias de Aprendizaje.
Cuando enseñamos a escribir debemos tener en cuenta cinco principio generales,
basados en el desarrollo psicoevolutivo de los niños que regirán todo el proceso.
Gradualidad:
La enseñanza de la escritura es gradual, desde la preescritura
hasta la escritura utilizada por el adulto.
Simultaneidad:
La lectura y la escritura son simultáneas, ya que hay una
estrecha e irrompible relación psicológica y técnica entre ellas.
Maduración
: Es necesario que el alumno tenga una madurez suficiente para
comenzar a trabajar la lecto‐escritura (desarrollo suficiente del lenguaje a nivel
oral, equilibrio emocional, desarrollo simbólico…).
Legibilidad:
Debemos conseguir en el niño una escritura legible y rápida. No
debemos forzar un tipo de letra en concreto, aunque es conveniente comenzar
por letra ligada o cursiva.
Adecuación:
El docente debe respetar el ritmo de aprendizaje del alumno y
adaptar el método a las distintas dificultades que puedan surgir.
Antes de comenzar con la enseñanza de la lectoescritura, los alumnos dominan en
mayor o menor medida el lenguaje oral, e incluso algunos pueden llegar a reconocer o
reproducir las letras del alfabeto. No debemos esperar que el alumno alcance un
dominio total del lenguaje oral para comenzar la escritura.
Existen diversos métodos para iniciar a los alumnos en el proceso de la enseñanza de la
escritura y la lectura, casi todos comparten los mismos principios, aunque varían las
técnicas y procedimientos usados. A continuación los analizaremos.
3.1.‐ Métodos para la enseñanza‐aprendizaje de la Expresión Escrita.
Puesto que no existe un método por excelencia, en la enseñanza de la lecto‐escritura,
sino que encontramos una gran variedad de los mismos, podemos englobarlos en tres
modelos según la metodología que utilizan. Estos modelos son:
o
El método sintético
, tomando de punto de partida los elementos menores a la
palabra. Se basa en la correspondencia entre el lenguaje oral y el escrito, entre
el sonido y la grafía. Comienza con la enseñanza de lo particular a lo general, de
unidades pequeñas a otras mayores. Existen tres variantes de este:
o
Método alfabético.
Se trata de métodos tradicionales que han quedado
en desuso, que partían de la letra a la palabra, pero poniendo énfasis en
el nombre de las letras.